(artículo originalmente enviado a la revista Networking Activo)
Entre mis actividades de networking favoritas se encuentra el desayuno. Casi todo el mundo desayuna, por lo que no estás robándole tiempo al día sino aprovechándolo de otra forma, y en cualquier caso un desayuno de trabajo no debe prolongarse más allá de media hora. Desayunando hace poco con un buen amigo me comentaba su intención de realizar un Master en Dirección de Empresas, el tan ansiado MBA, a pesar de que esta persona cuenta ya con una impecable y envidiable trayectoria profesional. Personalmente, le comenté, siempre he considerado que un MBA proporciona una importante ventaja competitiva y una visión global de negocio considerable cuando uno está empezando, acaba de salir de la Universidad y se enfrenta por primera vez a la selva de la empresa. Pero hay expertos que consideran que un MBA es el equivalente a tres o cuatro años de experiencia empresarial relevante, por lo que no tiene demasiado sentido emprenderlo cuando uno ya lleva doce años en empresas de primera línea con puestos de responsabilidad. A menos qué, claro.
A menos qué lo que andemos buscando en un Master sean los valiosos contactos que proporciona. Todos habremos escuchado alguna vez esta reflexión: lo importante del Master no es lo que aprendes, son los contactos. Y ahí tuve que darle parcialmente la razón a mi amigo. Parcialmente. Aunque sea cierto que los círculos de Networking surgidos a partir de haber compartido aulas, sumado al esfuerzo que las escuelas de negocio, conscientes de la importancia de esta factor, realizan para mantener y aumentar estas redes de networking (seminarios, encuentros de antiguos alumnos, revistas, eventos), no es menos cierto que el coste de un Maste, en tiempo y dinero, es bastante elevado, sobre todo si queremos asistir a “ese” o “aquel” Master, que son los que más contactos proporcionan.
Pero pensémoslo: si lo que valoramos realmente son los contactos, ¿no hay formas más eficientes, eficaces y efectivas de conseguir esos contactos? Comparemos la inversión en un master con el coste de asistir regularmente a los eventos de Networking profesional que se organizan en varios lugares del país, como por ejemplo los Thursday Internet en el marco de las nuevas tecnologías o los eventos Networking Activo para los que buscan contactos en el area de los negocios. Curiosamente, en muchas ocasiones estas mismas personas que valoran la posibilidad de endeudarse para hacer un Master y dedicarles las tardes de los viernes y los sábados completos durante dos años, a veces consideran que “no tienen tiempo” de asistir una vez al mes a un evento de Networking o que “es demasiado caro”.
Hay muchas formas más de ir construyendo nuestro “MBA Personal” en Networking: congresos, cursos, seminarios… Todos ellos con un coste menor que el de un master, y con la posibilidad de centrar los contenidos (y, con ello, a los asistentes) en función de nuestras áreas de experiencia o interés. Luego están todas las herramientas que Internet está poniendo a nuestra disposición: redes On-Line como LinkedIn o Xing, la blogosfera, foros, wikis…Comunidades profesionales, asociaciones, colegios, incluso ONG’s. Las posibilidades son realmente increibles. Pero claro, requiere un esfuerzo de organización personal, que comienza por ser consciente de cuáles son nuestros objetivos concretos cuando emprendemos un proyecto de Networking personal, qué podemos ofrecer a los demás y cuáles son los medios óptimos para lograr nuestros objetivos con los recursos con los que contamos. Quizá por eso el “Activo” de Networking Activo.
Si con todo ello no os convencéis de lo importante que es el Networking y lo asequible que realmente resulta, pensad una cosa: el año pasado, Antonio Calvo-Armengol, de la Universidad Autónoma de Barcelona, publicó un estudio en el que diferenciaba entre contactos fuertes, los más cercanos y personales, y contactos débiles, los que se consiguen en primera instancia vía Networking. Las conlusiones del estudio demostraban que los contactos débiles son más utiles a la hora de, por ejemplo, encontrar un nuevo trabajo o nuevas oportunidades de negocio, ya que los contactos más cercanos sólo nos aportan información que ya solemos tener, mientras que los débiles actúan como puentes entre las islas que forman los grupos de amigos más cohesionados. Estos puentes que nos brinda el Networking favorecen así el flujo de información entre las islas cotidianas. Los trabajos de Antonio sobre redes sociales y mercado laboral se basan en las más modernas teorías económicas y podéis encontrarlos en la red. Os los recomiendo como vuestro primer paso en pos del Master Personal en Networking.
Llevaba tiempo pensando en proponerte un e-coffe por skype. Ahora ya tengo excusa
Gracias por tu colaboración en la revista Networking Activo, te agradezco tu aportación a una revista que apenas está comenzando su andadura y que tiene mucha ilusión de continuidad y crecimiento de audiencia
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